Márquez, de 40 años, no pudo noquear pese a intentarlo al final, y se quedó a las puertas de alcanzar lo que hubiese sido su quinto título del mundo en diferente clase de peso.
La pelea no fue espectacular, pero los mejores golpes y los más eficaces fueron los que colocó Bradley en el décimo y duodécimo asaltos, cuando dejó tocado a Márquez, que estuvo a punto de irse a la lona.
“Demostré que fui superior y tiré los mejores golpes, dominé, impuse el ritmo de la pelea y al final revalidé el título que era el objetivo”, destacó Bradley al concluir el combate, que alarga su invicto hasta las 31 peleas. “Ahora tengo por delante tiempo para pensar y ver cual será el próximo rival, aunque está claro que soy el tercer mejor libra por libra del momento“.
El juez estadounidense Glenn Feldman dio como ganar a Márquez con una puntuación de 115-113, la misma que Robert Hoyle otorgó a Bradley, mientras que Patricia Morse Jarman vio como ganador también al actual campeón del mundo (116-112).
“No entro en el trabajo de los jueces, lo que importaba era conseguir la victoria y lo conseguimos”, destacó Bradley, que en la pelea ante Pacquiao se vio favorecido por una decisión de los jueces que generó críticas al darle ganador cuando el púgil filipino había sido el mejor sobre el cuadrilátero.
Márquez, que dejó su marca en 55-7-1, 40 KOs, volvió a mostrar de nuevo una gran preparación física, pero le faltó algo de ingenio para escapar de la estrategia de Bradley.
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